Según las investigaciones, «Toreto» se desempeñaba como explosivista en el área rural y urbana del municipio de Hacarí, siendo de confianza de alias Juancho Pellejo Explosivista y alias Kevin, mando de comisión de esta estructura. Era el encargado de almacenar, fabricar y acondicionar rampas de lanzamiento de AEI con el fin de derribar aeronaves de la fuerza pública en el área rural y urbana de Hacarí, además de realizar inteligencia delictiva en el casco urbano de Hacarí para llevar a cabo ataques terroristas contra la fuerza pública.
Se cree que «Toreto» ha estado involucrado en actividades delictivas durante más de ocho años y tenía experiencia en el manejo de explosivos y como tropero de un comando de fuerzas especiales. Entre los meses de agosto y octubre de 2020, fabricó y acondicionó rampas y artefactos explosivos bajo órdenes de alias Kevin para ejecutar acciones terroristas contra aeronaves de la fuerza pública en el área rural y urbana de Hacarí.
Al momento de su captura, «Toreto» se encontraba en el municipio de Ocaña realizando misiones de inteligencia para llevar a cabo acciones terroristas en contra de la fuerza pública. La captura de este delincuente afecta la estructura de esta organización criminal y ofrece un mensaje de tranquilidad para la población civil, que también se ve afectada por estos grupos al margen de la ley, según señaló el Teniente Coronel Juan Carlos Jara, Subcomandante del Departamento Norte de Santander.
