El aval fue firmado por la directora nacional de la colectividad Nubia Stella Martínez.
Santamaría es exdiputado y una figura conocida del Centro Democrático en la región por su posición firme contra los grupos terroristas e incluso esta semana se pronunció para rechazar que mientras la guerrilla ha asesinado más de 100 personas en el departamento las ONG y llamadas organizaciones sociales guardan silencio.
Hace un mes concedió una entrevista a News Radio donde habló de varios asuntos inherentes a su campaña. Sugirió que de ganar la alcaldía uno de sus compromisos es trabajar con la Escuela Militar de Ingenieros y «así no se le paga a ningún grupo, a políticos, ni tramitadores y las obras terminarían bien hechas».
Aseveró que atenderá a las comunidades y resaltó que las principales quejas en Arauquita son por los excesos en el cobro de los servicios públicos, por el deficiente suministro de agua, la inseguridad, la oscuridad en el parque principal y en general la falta de gestión.
Recordó que lamentablemente hay varias denuncias en la Fiscalía y medios de comunicación porque muchos de los recursos públicos terminan en manos de grupos al margen de la ley.
«Muchos contratistas han denunciado que las obras no se pueden terminar o tampoco cumplir con las garantías que exige el Estado por las grandes sumas de dinero que se pagan para poder garantizar la seguridad de los trabajadores», expresó.
El también exdiputado manifestó que la realidad del departamento es muy distinta a lo plasmado en el Acuerdo de Paz con la guerrilla de las Farc.
«En Arauca no ha habido paz ni cese de hostilidades. Todos los días hay violencia. Aún en el proceso de negociación un grupo al margen de la ley atacaba todos los días», comentó Santamaría.
Definió lo pactado como un «narco-acuerdo», a su juicio, firmado entre «peces gordos».
