Población víctima de la violencia, desplazados, discapacitados, madres cabeza de familia y personas en proceso de reintegración, se forman con el SENA Regional Arauca en curso de panadería básica, en alianza con la Fundación Sagrado Corazón de Jesús.
En las últimas dos semanas, 30 personas pertenecientes a población vulnerable en el municipio de Arauca están siendo formadas con el SENA, en la elaboración de productos de panadería como panes, donas, pizzas, mantecadas, tortas, entre otros.
El objetivo de este tipo de capacitaciones es motivar al emprendimiento entre sus participantes, en busca de mejores opciones de vida, que aporten al desarrollo de la región.
“Pretendemos que esto se convierta en un proyecto autosostenible, con el que los aprendices puedan elaborar sus propios productos, los puedan sacar al mercado, venderlos y obtener ganancias para estas familias necesitadas”, sostuvo Oscar Ortiz, instructor de agroindustria del SENA Regional Arauca.
Gracias a unos equipos de panadería que fueron donados hace dos años por la Alcaldía y Gobernación de Arauca, y que no habían sido utilizados hasta la fecha, se pretende a mediano plazo formar micro-empresa con los aprendices que hoy se capacitan en panadería, quienes contarán con el apoyo de la Fundación Sagrado Corazón de Jesús.
“La idea es continuar, seguir a delante con los cursos de panadería que nos está ofreciendo el SENA, pero lo más importante es que queremos crear empresa y gracias a la formación que estamos recibiendo lo podemos hacer realidad”, señaló Sandra Patricia Benítez, representante de discapacidad cognitiva del municipio de Arauca, quien es aprendiz de este curso de panadería.
Terminado este curso el SENA tiene proyectado, continuar formando a este grupo de personas en panadería avanzada, bizcochería, manipulación de alimentos y emprendimiento.
