En Unas operaciones de control militar de área efectuadas en las extensas sabanas de la vereda El Pesebre, municipio de Tame, departamento de Arauca, salvaron la vida de un canino que se encontraba en precarias condiciones y en grave estado de salud.
Todo sucedió una madrugada, mientras tropas de la Décima Octava Brigada se encontraban realizando un registro perimétrico en una zona de difícil acceso; allí, mientras caminaban sigilosamente divisaron a escasos metros de ellos una vivienda que evidentemente llevaba abandonada bastante tiempo, encontrando, en un corral cercano, a un pequeño canino de raza labrador, con mirada triste, desconcertado, y a simple vista desnutrido y maltratado.
Tras tomar la decisión de adoptarlo, los soldados, quienes ven en los perros como un compañero de batallas, pues estos fieles animales los siguen a todas partes y en ocasiones es tan grande la conexión entre ellos que como fieras salvajes protegen a los soldados de los peligros de la naturaleza, salvándoles la vida; dieron inicio a la valiente labor de curar al canino, que además, recibió el nombre de Zeus por parte de su rescatista.
Zeus que fue canalizado, desparasitado y alimentado con dietas especiales para lograr la recuperación de su peso, se ganó el amor de cada hombre que lo acompañó en ese proceso durante tres meses, al punto de convertirse en un elemento valioso para la Institución, con su valentía, fuerza y entrega absoluta en señal de agradecimiento a quienes les salvaron la vida, esos valientes hombres que están para proteger y servir a los demás, los valientes soldados del Ejército Nacional.