Guerrilleros del auto denominado 10mo Frente de las Farc, “Martín Villa”, o disidentes del acuerdo de paz murieron cuando manipulaban un artefacto explosivo en pleno centro del caserío La Paz, municipio de Arauquita.
La explosión causó terror entre los habitantes del centro poblado, quienes contaron a Meridiano 70 que sobre las 6:00 de la tarde la tranquilidad de las familias que se recogían en sus hogares tras la jornada de trabajo se vio alterada bruscamente, “Quedamos paralizados, todo era confuso”, dijo una habitante del caserío.
“Tímidamente salimos a la vía, los vecinos ya se juntaban cerca a la caseta comunal. Los cuerpos estaban regados entre un lavadero de carros (taller) y la caseta comunal”, agrego un testigo, quien pidió no revelar su nombre.
Según testigos y habitantes del sector, las víctimas fueron identificadas como Camilo Oregón, Oscar Lagos, Eduardo José Veleña y el líder social Homero Ortega.
Nelson Pérez, secretario de Gobierno del municipio de Arauquita, que hasta horas de la mañana de este jueves, una comisión del CTI se trasladó para realizar el levantamiento de los cuerpos, los cuales quedaron con notables signos de quemaduras y heridas debido a lo cercano a la explosión.
Por su parte el Defensor del Pueblo, el padre Deisson Mariño, indicó que la comunidad ha aportado la información para la identificación de las víctimas y acotó que no se le fue permitido que la funeraria realizara el levantamiento de los cuerpos, puesto que debían ser las mismas autoridades; en este caso el CTI, para esa labor.
“Se ha dicho que son personas conocidas en la comunidad, que trabajaban en la comunidad, por lo que no entendemos que pasó, pero bien sabemos que en el departamento de Arauca existe una gran cantidad de artefactos explosivos instalados sin detonar y estas personas cayeron víctimas de esta situación”, dijo el Defensor.
Los guerrilleros estarían preparando un atentado contra tropas de Ejército que se encontraban en las afueras del Centro Poblado de La Paz. Esta versión circulaba anoche en el centro poblado con mucha intensidad pero a baja voz, lo que hace concluir el miedo y terror en la población civil.
fuente meridiano70.co