Esposado y con cupo en un establecimiento carcelario salió ayer José Ángel Pinzón Gómez, de 46 años, del Centro de Servicios Judiciales de Bucaramanga, quien afronta desde esta semana un grave proceso judicial por el delito de explotación sexual comercial con persona menor de 18 años.
Este individuo, de acuerdo a los recopilado por las autoridades, a través de un perfil en redes sociales en el que se hacía llamar ‘Mario el Prestamista’, contactaba a niñas y adolescentes, estudiantes de colegios y universidades para ofrecerles dinero y luego les manifestaba que podían pagarle con favores sexuales.
Aunque por el momento no ha sido posible establecer con exactitud cuántas menores de edad cayeron en manos de este sujeto, se conoció que desde hace algún tiempo usuarios de Facebook ya habían alertado sobre su modus operandi en diversas páginas de esta red; sin embargo, como se escondía detrás de un nombre falso, nadie antes lo había denunciado penalmente.
El hecho
Todo parece indicar que a José Ángel la suerte se le acabó el pasado martes, cuando un joven de 17 años, estudiante de un colegio público del área metropolitana, se acercó a las instalaciones de la Sijín y les contó a las autoridades como venía siendo asechada por este individuo.
Según la denunciante, ‘Mario el Prestamista’, desde hace varios días, le había enviado una serie de mensajes a su celular en los que le manifestaba que si quería le prestaba $200 mil, pero luego le cobraba de otra manera.
Al parecer, el hombre no sólo le escribía a lo joven por su redes sociales (Facebook y WhatsApp), además habría estado rondado el colegio donde ella estudiaba, puesto que, según los investigadores, esta persona también repartía tarjetas a las afueras de las instituciones en las que ofrecía su servicio como prestamista.
Para dar con el arresto del señalado delincuente, y guiada por los investigadores, la víctima cuadró una cita con ‘Mario’ donde supuestamente él le daría el dinero.
Fue así que la afectada, siguiendo el juego, se acercó sobre las 5:00 de la tarde del pasado mates, hasta las afueras de una clínica en el sector de Cañaveral, Floridablanca.
Al llegar, efectivamente, allí se encontraba Pinzón Gómez esperándola. El hombre le entregó $50 mil y le dijo que lo acompañara a una oficina aledaña, en donde le entregaría la suma restante y posteriormente ella debía acceder a sus peticiones sexuales en forma de pago.
Justo cuando recibía el dinero, funcionarios de la Unidad Investigativa de Delitos Sexuales de la Sijín intervinieron y arrestaron en flagrancia al hombre de 46 años, quien en realidad era un mensajero de oficio.
Esta persona fue presentada en la noche del miércoles en audiencia, que se prolongó hasta las 3:30 a.m. de ayer.
A pesar de que no aceptó los cargos, le dictaron medida de aseguramiento en establecimiento carcelario.
fuente por Vanguardia.