El acuerdo alcanzado entre el Gobierno Nacional y el Ejército de Liberación Nacional para iniciar un cese al fuego bilateral, a partir del próximo primero de octubre, es una gran noticia para la infraestructura petrolera del país, que ha visto como este grupo ha ocasionado un gran daño al patrimonio de los colombianos y ha afectado un sinnúmero de compatriotas.
La estatal petrolera Ecopetrol informó que en lo corrido del año se han presentado 44 atentados contra la infraestructura petrolera del país, siendo el oleoducto Caño Limón Coveñas el más afectado con 43 voladuras en los departamentos de Arauca, Norte de Santander, Boyacá y Cesar.
Además, informó que el otro evento que se registró por cuenta de la guerrilla del Eln ocurrió en el oleoducto transandino, en la vereda El Arenal, del municipio de Ricaurte, Nariño, el cual dejó una mancha de crudo en el cauce del río Güiza, contaminando la zona.
Según la Asociación Colombiana de Petróleos (ACP), fueron más de 10.000 barriles diarios de producción los que se vieron afectados durante el primer semestre del año a causa de estos eventos. Solo en el 2016 la compañía petrolera invirtió cerca de 40.000 millones de pesos en reparaciones.
Según la firma colombiana, los atentados y la instalación de conexiones ilícitas a lo largo del oleoducto Caño Limón Coveñas dejaron en el primer semestre una afectación ambiental de 13.300 metros cuadrados y se ha provocado el derrame de 11.064 barriles de petróleo.
El ataque más reciente ocurrió la semana pasada en la vereda El Cajón, del municipio de El Carmen, región de Catatumbo, Norte Santander, donde se adjudicó el ataque al frente Francisco Bossio del Eln. Este evento generó caída de crudo en las quebradas La Virgen y El Carmen.
Precisamente Ecopetrol calificó el acuerdo como una “buena noticia”, ya que esto “beneficiará a las comunidades y al medio ambiente en la región del Catatumbo, por donde pasa el oleoducto Caño Limón Coveñas, uno de los más afectados por los atentados perpetrados.
Procesos judiciales contra el Eln
El ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, señaló que en lo corrido del año las ofensivas contra el Eln han dejado 469 capturas, 30 muertos, 743 neutralizaciones, 244 desmovilizados y 16 muertos de la Fuerza Pública.
Por su parte, la Fiscalía General de la Nación reveló que el Eln es investigado por 3664 delitos que dejaron 4471 víctimas. Además, señaló que los integrantes del grupo armado han incurrido en 1129 casos de rebelión, que se constituyen en 26 % de los procesos totales que adelanta la entidad.
Según el reporte del órgano acusador, la región que más víctimas ha dejado dicho conflicto es Antioquia, con 2019 casos, seguido por Cesar (456), Chocó (376), Norte de Santander (547) y Arauca (207).
Frente a los ataque registrados contra los oleoductos, la Fiscalía estableció que dichos actos se constituyen como la mayor catástrofe ambiental producida por derrame de petróleo en el mundo, seguida por la ocurrida en 1980 en la plataforma IxtocI, en el Golfo de México.
La Fiscalía General de la Nación le ha imputado en varias oportunidades al Comando Central del Eln cargos por la afectación al sistema petrolera del país.
Reclutamiento de menores
Según un reporte de la Fiscalía, en 2015 el Comando Central fue condenado por el Juzgado Penal de Istmina (Chocó), a diez años de cárcel, por el reclutamiento de una menor de edad, la cual ingresó a esa guerrilla mediante engaños en el año 2006.
Según el relato de la joven, quien aceptó su pertenencia al ‘Frente de Resistencia Cimarrón’ del Eln, en febrero de 2006 se encontraba en su casa en el corregimiento Piedra Honda, en Bagadó (Chocó), cuando unos hombres llegaron y le ofrecieron que se fuera con ellos, argumentado “que la vida allá (con el Eln) era buena, que le iban a pagar y que no le faltaría nada”.
Masacre de Machuca
En 2007, la Corte Suprema de Justicia ratificó la pena de 40 años de prisión contra el COCE por la masacre de Machuca (Antioquia), en la cual murieron más de 40 personas calcinadas y 30 más resultaron gravemente heridas, luego de que el Eln detonara una carga explosiva en el oleoducto Cusiana–Coveñas, en inmediaciones al corregimiento Machuca, del municipio de Segovia (Antioquia).