Durante la noche del sábado 02 de agosto de 2025, un grupo de presuntos indígenas guajibos irrumpió en una vivienda ubicada en la vereda Las Acacias 1, en zona rural del municipio de Tame, departamento de Arauca. De acuerdo con versiones de los afectados, los responsables del robo portaban escopetas y pistolas, y actuaron con total libertad.
Según denuncian habitantes del sector, esta es la cuarta vez que esa misma casa es blanco de robos sin que hasta el momento se haya registrado una respuesta por parte de las autoridades. No hay autoridad que actúe ante las acciones impunes de los responsables.
Este nuevo hecho se suma a la polémica protagonizada por el alcalde de Arauca, Juan Alfredo Qüenza Ramos, quien días atrás criticó duramente a algunas comunidades indígenas por la falta de control frente a actos delictivos de algunos de sus miembros. Las asociaciones o gremios indígenas Ascatidar y Asocata tampoco adoptan garantías para el control y las actuaciones de estos indígenas, recriminó el mandatario municipal en una sesión del comité de aborígenes celebrada en la capital departamental.
Como reacción a estos señalamientos, Danilo Antonio Tamarán Cobaría, presidente de Ascatidar, interpuso una demanda contra el alcalde Qüenza Ramos. La querella se fundamenta en lo que la organización considera afirmaciones “estigmatizantes” contra los pueblos indígenas, especialmente por mencionar que los hechos delictivos en la vía Tame–Arauca involucran a miembros de estas comunidades.
Mientras se usa la situación para ataques políticos, siguen ocurriendo los robos.
