El Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis, aseguró que desde la Defensoría del Pueblo le solicitó a la Oficina del Alto Comisionado de Paz conocer de manera oficial el protocolo establecido por el Gobierno Nacional y el Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc, en el marco del cese bilateral, con el objetivo de hacer el seguimiento y monitoreo correspondiente, según nos lo establece la Constitución como Institución Nacional de Derechos Humanos.
“Una vez conozcamos los detalles del protocolo, desde nuestro Sistema de Alertas Tempranas, procederemos a incorporarlos a nuestro ejercicio de monitoreo y seguimiento en lo relacionado con este grupo armado ilegal y estaremos atentos a que se presenten los protocolos con los otros tres grupos con los cuales el Gobierno Nacional decretó el cese el fuego”, aseguró Carlos Camargo Assis, durante el Seminario Internacional Paz Total, organizado por la Defensoría del Pueblo y la Universidad Católica.
En dicho, el Defensor del Pueblo reiteró el compromiso de la Defensoría del Pueblo para acompañar todos los esfuerzos de paz que viene impulsando el Gobierno del Presidente Gustavo Petro. “Así mismo, reiteramos el llamado a los grupos armados ilegales a frenar cualquier acción que afecte a la población civil y dar claras muestras de paz”, agregó.
La paz total empieza por el cese total de las hostilidades y el respeto por la población civil, recalcó. “No se trata únicamente de un cese al fuego, sino de un cese de todas las actividades que impliquen ataques a la población civil como las extorsiones, las amenazas, los secuestros. Si no se respetan los derechos humanos y el derecho internacional humanitario no puede hablarse de hostilidades e inicios de la paz”, destacó.
Adicionalmente, dijo que la agenda de paz no puede ser indiferente, ni el Gobierno nacional omisivo frente a la continuidad de acciones armadas indiscriminadas que violen el principio de distinción, victimizando a la población civil.
Carlos Camargo Assis aseguró que “la paz demanda la materialización innegociable de acciones palpables, por parte de todos los actores, en favor de las víctimas. Cualquier norma y política sobre paz que se proponga, debe centrarse en el derecho de las víctimas y la población civil en general, a una vida libre de violencias y a la no repetición”.
“Finalmente, reitero mi compromiso como facilitador y promotor del diálogo, pero también como principal veedor y vigilante especializado de las garantías y los derechos humanos de la población civil y de las víctimas de Colombia”, puntualizó el Defensor del Pueblo.