Después de 6 años de restricciones, el gobierno de Venezuela ordenó remover los obstáculos que cerreban la frontera con Colombia, que otrora fue uno de los pasos limítrofes más activos de América Latina, pero aún no parece estar claro cómo será el proceso, ya que el ejecutivo del vecino país pide una «apertura ordenada».
Durante los últimos seis años hubo aperturas parciales y, por supuesto, aparecieron las trochas y los «trocheros», mafias que se lucraban de la necesidad económica y sanitaria de personas que necesitaban, básicamente, ir a Colombia en búsqueda de trabajo, alimentos y medicinas.
El economista Aldo Contreras, especialista en relaciones económicas internacionales, señala que para que la frontera colombo-venezolana se considere efectivamente abierta, se deben permitir las siguientes 9 actividades:
1. Tránsito vehicular
2. Transitó de mercaderías.
3. Acuerdos económicos.
4. Preferencias arancelarias.
5. Casas de cambio.
6. Agentes aduanales.
7. Movimientos migratorios
8. Créditos
9. Intercambio comercial.
Un asunto medular es que las relaciones diplomáticas entre Venezuela y Colombia están rotas, y no por una causa baladí, sino porque Bogotá no reconoce a Nicolás Maduro como presidente de Venezuela, sino al dirigente opositor Juan Guaidó, quien, en su cuenta de Twitter, señaló que «He conversado con el Presidente Duque sobre la necesidad de la apertura controlada de la frontera y del restablecimiento de los servicios consulares de Colombia en Venezuela, basados en la convención de Viena».
Y en otro tuit indicó que «Mucho agradecemos al gobierno de Colombia que haya abierto la frontera desde el 1ero de Junio. Estos gestos protegen a los más vulnerables. Sabemos que el beneficio aumentará con mayor apertura de nuestras fronteras y el regreso de la democracia a Venezuela».
En consecuencia, no se sabe cómo se regulará la reapertura, ya que Duque conversa con Guaidó, quien no tiene control territorial alguno en Venezuela como para que sus decisiones tengan algún efecto. Hasta ahora, el «protector» del estado Táchira, Freddy Bernal -quien, además, es el candidato oficialista a la gobernación del estado- ha venido negociando el proceso de apertura con las autoridades del Departamento Norte de Santander, ya que el foco de intercambio económico está en Cúcuta.
-Intercambio comercial-
De acuerdo con las cifras reportadas por la Cámara de Integración Comercial Venezolano-Colombiana (Cavecol), el intercambio comercial formal entre ambos países se ubicó en 121 millones de dólares entre enero y mayo de este año, un aumento de 61% en comparación con el mismo lapso del año pasado.
Las importaciones desde Colombia subieron 51%, al pasar de 66 millones a 101 millones de dólares en el período reportado, mientras que las exportaciones aumentaron 142%, aunque las cifras son irrisorias. Las ventas externas al vecino país pasaron de 8 a 21 millones de dólares al término de los primeros cinco meses de 2021.
Venezuela y Colombia comparten una frontera común que se extiende por 2.219 kilómetros, y las constantes tensiones entre sus gobiernos han causado un enorme impacto negativo tanto económico como social.
Los problemas comenzaron en 2005, cuando los presidentes Hugo Chávez (+) y Álvaro Uribe Vélez se enfrentaron por la detención del guerrillero colombiano Rodrigó Granda, quien, según la versión del presidente Chávez, habría sido detenido en Caracas, por lo que acusó a su homólogo negranadino de violar la soberanía nacional y decidió «congelar» las relaciones diplomáticas.
En 2008, según un reporte de Cavecol, el intercambio comercial llegó a un máximo histórico de 7.290 millones de dólares.
La frontera se ha mantenido restringida al intercambio desde 2014, pero el cierre total se decretó en 2019, cuando la administración de Iván Duque reconoció al dirigente opositor Juan Guaidó como mandatario interino y se intentó pasar ayuda humanitaria que fue bloqueada por el gobierno de Nicolás Maduro.
Vía Banca Y Negocios