Bajos de peso, malnutridos y con malos hábitos alimenticios llegan los niños venezolanos al colegio La Frontera, en Villa del Rosario.
Unos 450 estudiantes fueron valorados por la Fundación Comparte por una Vida y Digisalud en cuanto a su peso, su talla, su masa corporal, sus niveles de hierro, y otros aspectos físicos.
El propósito es recolectar los datos nutricionales de estos estudiantes para incluirlos dentro del programa de alimentación escolar que viene desarrollando la fundación, desde hace dos años, en los colegios de Venezuela.
Por medio de este programa los niños reciben meriendas y almuerzos en sus colegios, y se les hace un seguimiento a través de una aplicación tecnológica desarrollada por Digisalud que les permite verificar cómo ha mejorado el alumno nutricionalmente y de lo contrario hacer los ajustes a los alimentos que está consumiendo. Este modelo lo van a replicar en Cúcuta.
“Esta información nos ayuda a determinar las necesidades nutricionales de los niños que vamos a intervenir y así poder desarrollar el menú ajustado y ubicar las carencias de cada niño para poder aplicar suplementos alimenticios para los que requieran”, explicó Lala Lovera, representante de la fundación en Colombia.
Lovera indicó que no van a trabajar exclusivamente con población venezolana, sino que están incluyendo al resto de los estudiantes para hacer el programa más incluyente.
Explica que el plan involucra al personal del colegio, y a las madres de los estudiantes, a las que se les capacita en lo relacionado con la manipulación de alimentos y buenos hábitos de salud nutritiva.
fuente por .laopinion.com.co