La directiva de la Empresa de Energía de Arauca (Enelar) fue objeto de un debate de control político en la Asamblea departamental, jornada que ya se adelantó con el Instituto de Desarrollo de Arauca (Idear), la Agencia de Renovación del Territorio (ART) subregión Arauca y la secretaría de Obras de la gobernación.
Luego de la jornada quedaron más dudas que respuestas y el informe fue parecido al de años anteriores. “Compramos 23 millones de kilovatios mensuales, pero solo facturamos 15 millones, lo que quiere decir que solo en la compra ya estamos perdiendo”, expresó la presidenta de la Asamblea departamental, Mercedes Rincón Espinel.
El tema de fondo es que la empresa no le entrega utilidades a la Gobernación, que es la propietaria, por lo tanto, asume la ineficacia en el manejo comercial de comprar y vender energía.
La diputada enfatizó que las empresas público-privadas del departamento no son rentables, aunque no tienen competencia. “Hace falta gerencia”, dijo, al tiempo que recordó que la actual gerente lleva poco tiempo en el cargo, sin embargo, su predecesor ni siquiera dio la cara.
La asambleísta pidió al contralor Luis Fernando Márquez una auditoría técnica y financiera para determinar si realmente la empresa es viable o no.
Ello lo solicitó al momento de evidenciar inconsistencias en el informe que presentaron por parte de Enelar, entre otras, en una página dice que las pérdidas son de 30 % y en otra indican que son de 35 %. “Dejémoslo en 30 %, para no pelear.
La mitad de eso es recuperable, la otra mitad no. Se están perdiendo 2 mil millones de pesos mensuales solo en la compra de la energía”, expresó Rincón Espinel.
El número de trabajadores no sería el problema más grave, de acuerdo a la diputada. Afirmó que siempre se culpa a los políticos que tienen empleados en las entidades, a lo que respondió que no tiene a ningún patrocinado. “Los mayores desfalcos no vienen del personal, sino simplemente porque no se cumplen los objetivos de cada una de las carteras”, comentó.
También se preguntó cuántas cuadrillas se tienen para corte, en vista de que es necesario el personal para esa labor, debido a que hay empresas que están en barrios y evaden los pagos. “No necesariamente se trata de familias humildes”, aseveró.
De igual forma, Rincón pidió a las autoridades de Enelar confirmar si hay proyectos para electrificación de barrios subnormales, tal como lo informó el Idear, instituto que fue la anterior entidad interpelada porque tampoco cumple con las metas.