A Medicina Legal en Yopal fueron traslados por la funeraria Los Ángeles los cuerpos de los tres integrantes de la familia Velandia Fonseca asesinados cruelmente en zona rural del municipio de Sácama.
La masacre se registró el domingo 26 de diciembre hacia las 8:00 de la noche en la finca Rancho Alegre de la vereda Sabanalarga, hasta donde llegaron sujetos armados y dispararon contra las personas que habitaban en el lugar, dando muerte al joven Farley Vargas e hiriendo a Adonay quien fue remitido a un centro médico por unidades de Bomberos que arribaron al lugar y que además trasladaron a un menor que resultó ileso.
Esa noche se decía por parte de vecinos y conocidos de la familia Vargas, que la pareja de esposos conformada por Dámaso Vargas y doña María Fonseca estaban desaparecidos, pero en la mañana de este 27 de diciembre se confirmó que juntos habían sido degollados y fueron hallados a un kilómetro
de la finca.
Sobre don Dámaso se conoció que era trabajador del campo y que en el 2011 se había postulado como candidato al Concejo de Sácama por el partido ASI con el lema “Porque el campo es la fortaleza del pueblo”.
Según lo que ha manifestado la comunidad, podría haber una cuarta víctima quien también se encontraba en la casa en el momento en el que fue perpetrado este hecho violento, ante la confirmación de este suceso por parte de las autoridades, el gobernador de Casanare Salomón Sanabria, expresó total rechazo a los hechos violentos que sacuden al municipio de Sácama.
«Mi total solidaridad con los familiares y vecinos de esta población, quienes de manera violenta sufrieron un ataque sicarial donde perdieron la vida tres personas. Como administración departamental estamos realizando las coordinaciones necesarias con la fuerza pública con el fin de esclarecer los hechos. No vamos a permitir que unos pocos delincuentes nos amedranten», señaló el Gobernador.
La Asociación Nacional de Campesinos, José Antonio Galán Zorro, Asonalca, denunció que se agudiza la situación de Derechos Humanos en el norte de Casanare y al rechazar el hecho, indicó que la masacre se presentó en una zona de alto control militar y policial, ya que está cerca al casco urbano del municipio y a la vía que comunica al departamento de Arauca.
En la zona donde ocurrió el fatídico hecho se están ejecutando proyectos de infraestructura como la pavimentación de la ruta los Libertadores Belén – Paz de Ariporo y existen bloques petroleros con contratos en estudios preliminares y exploración.
Asonalca recordó que la Defensoría del Pueblo y la Asociación Nacional Campesina habían emitido una alerta temprana sobre las amenazas realizadas por medio de panfletos contra las comunidades de los municipios de Yopal, Aguazul, Támara, La Salina, Sácama en Casanare, así como Pajarito y Pisba en el departamento de Boyacá.
“Denunciamos la masacre cometida contra la familia campesina Velandia Fonseca. Exigimos el respeto por la vida y los derechos humanos; el Estado colombiano, en cabeza de Iván Duque y el gobernador de Casanare, Salomón Sanabria son responsables de garantizar la vida, libertad e integridad de las comunidades y el ejercicio y la labor de las organizaciones y líderes sociales de Sácama.
A las organizaciones rebeldes y al Estado colombiano, los exhortamos a respetar el principio de distinción consignado en el DIH y a dejar fuera del conflicto a la población civil. Hacemos un llamado a las organizaciones sociales, defensoras de los derechos humanos, medios de comunicación, a rodear la comunidad del norte de Casanare, brindar acompañamiento y monitoreo a la situación en materia de derechos humanos y derecho internacional humanitario” puntualizó Asonalca.