Una nueva iniciativa como contribución a la mitigación del riesgo de contagio del COVID-19 en el departamento de Arauca ha sido puesta en marcha por el SENA Regional Arauca, se trata de una cabina de desinfección por aspersión, la cual fue ubicada en la zona de ingreso de urgencias del Hospital San Vicente.
El desarrollo tecnológico de esta cabina de desinfección se llevó a cabo en las instalaciones del Centro de Gestión y Desarrollo Agroindustrial de Arauca, por instructores del SENA, quienes vienen trabajando arduamente durante las últimas semanas en brindar soluciones reales que protejan la vida de la comunidad en general, ante la pandemia.
“Nuestra Entidad ha desplegado todo su talento humano hacia la creación de soluciones relacionadas con la mitigación de la pandemia, producto del COVID-19… de esta forma continuaremos abriendo más frentes de trabajo para contribuir con conocimiento a soluciones para esta crisis”, señaló Eddie Yovanny Millán, Director Regional del SENA Arauca.
La cabina de desinfección de un metro de base por dos metros de alto, consta de cinco micro aspersores y un sensor de presencia y movimiento, el cual al detectar a una persona en su interior, activa su función de aspersión a través de una electrobomba, impregnandola del líquido amonio cuaternario de quinta generación, para minimizar su riesgo de contagio.
El Hospital San Vicente de Arauca, además de validar el correcto funcionamiento de esta cabina de desinfección, fue seleccionado para colocar esta prueba piloto en sus instalaciones, por ser el ente departamental que recibe los casos de COVID-19 en la región, como una forma de proteger a las personas que ingresan a este establecimiento y de brindar apoyo al personal médico y asistencial, quienes juegan un papel fundamental en esta crisis.
El ingeniero Millán sostuvo que los productos y prototipos, que están siendo diseñados y fabricados por el SENA en Arauca, están disponibles para quienes los requieran, para lo que es fundamental el concurso de la empresa privada mediante aportes en materiales.
La idea con este proyecto es que las diferentes empresas de la región también puedan tener su propia cabina de desinfección, para protección de todo el personal que labora en las empresas. El valor de los materiales para la fabricación de la cabina de desinfección está entre el millón doscientos y millón quinientos, puesto que el SENA colocaría la mano de obra sin costo alguno.
