Desde anoche, los padres de las basquetbolistas prejuveniles del colegio Juan José Rondón del municipio Paz de Ariporo, Casanare, emprendieron un viaje de cuatro horas y media desde su municipio hasta el gimnasio Santa Teresita de Arauca para hacerle barra a su equipo que se enfrentaba contra la Institución Normal María Inmaculada de Arauca. Sus progenitores, apasionados por el deporte que ellas practican, aseguran que llegarán hasta la sede de la Final Nacional de Supérate Intercolegiados.
Sergio Herrera Tovar es uno de ellos. Él afirma que su pequeña Alejandra “juega desde que tenía 6 años, entonces cómo no vamos a apoyarla si nos ha regalado tantas alegrías. Es que Supérate es una gran plataforma, es el único que da el apoyo real al deporte. La prima de mi niña, Juliana Sofía Fernández, es la número 11 y también está ahí rumbo a la final nacional”.
Pero el protagonismo en la cancha se lo llevaron las gemelas Viviana y Natalia Durán Gómez. Su madre Consuelo, docente de Juan José Rondón, quien no pudo asistir, se tomó unos minutos en una llamada para hablar de sus hijas: “Desde los 8 años practican baloncesto; ellas respiran baloncesto, son muy buenas, iniciaron gracias a su hermano mayor, Iván, quien les enseñó el deporte pero ahora está en la universidad. Soy una mamá feliz y orgullosa, han logrado glorias y tienen un deseo de superación, de ser mejores cada día a través de esta práctica”.
Las basquetbolistas idénticas de 13 años dedican este triunfo a su mamá y cuentan cómo llegaron a este deporte: “Empezamos con taekwondo, pero mi hermano nos mostró el baloncesto y nos gustó más. Nuestra historia es muy bonita, porque mi mamá sola nos ha sacado adelante, nos apoya en todo; ahora, estamos muy felices de pasar a la final porque desde los 10 años hemos tratado de llegar a la regional, ya que el año pasado no pasamos de la departamental perdimos, y hoy se nos dio la dicha de irnos a La final con Supérate. Además, nos parece muy chévere porque conocemos otras personas, otras ciudades y los servicios que nos dan son súper”.
Pero la dicha no es para todos. Una de las gemelas, Angie Vanesa Rojas Luna, de 11 años, perteneciente a la Institución Normal María Inmaculada de Arauca, y que vio como el resultado favorecía a sus contrincantes, además de su gemela, tiene dos hermanos menores también gemelos. Ella dice: “Es la primera vez que estamos en Supérate y es muy chistoso porque las rivales no nos identifican, aunque yo manejo la derecha y Angie Valentina la izquierda. Lo que queda es que tenemos que seguir trabajando y estar comprometidas para lograr pasar el próximo año”.