El hombre se escondía en Santander y evitaba salir de su casa para burlar a las autoridades.
En el área metropolitana de Bucaramanga, nuevamente, fue capturado Luis Eduardo Guerrero Salazar. Esta vez, para que cumpla una condena de 33 años de cárcel tras ser declarado culpable del doble homicidio de Leidy Johana León y Yudy Torcoroma Pinzón, ocurrido en abril de 2011, en Ocaña.
Uniformados de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) de la Policía, en conjunto con la Fiscalía, arribaron hasta el barrio Limoncito de Floridablanca (Santander), para detener a Guerrero, quien tenía orden de captura (por un fallo de segunda instancia).
Luis Eduardo ya había estado preso durante diez meses por este hecho, pero fue liberado por un fallo de primera instancia.
Sin embargo, dos años después, un juez de Ocaña determinó que el sospechoso sí fue responsable del doble crimen y ordenó su aprehensión.
Según se conoció, Guerrero se escondía en Santander y evitaba salir de su casa para burlar a las autoridades.
¿Qué pasó?
Las dos mujeres, de 25 años, fueron asesinadas en el barrio La Palmita de Ocaña.
El agresor, había sido compañero sentimental de una de las víctimas. La noche anterior al crimen estuvieron en un bar.
Todo indica que Yudy fue la primera en morir y que Leidy fue asesinada luego de que salió de la cocina al escuchar los gritos de su compañera y amiga.