La fiscalía general de la Nación obtuvo elementos materiales probatorios que dan cuenta de la presunta responsabilidad de Brandon Andrey Cárdenas Sanguino, alias Brandon o Grande; y Luis Felipe Taborda Delgado, alias Dayron Pérez, en el crimen de Miguel Ángel López, un trabajador de servicios funerarios, su esposa y uno de sus hijos menores de edad, el pasado 15 de enero, en inmediaciones de la vereda La Llana de Tibú, Norte de Santander.
Un fiscal de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales presentó a estos dos señalados integrantes del frente 33 de las disidencias de las Farc ante un juez de control de garantías, y les imputó los delitos de homicidio agravado, concierto para delinquir agravado, y fabricación, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
Los cargos no fueron aceptados. En el curso de la investigación se conoció que alias Brandon o Grande, posible cabecilla de una estructura del grupo armado ilegal, habría recibido la orden de ejecutar la acción criminal, por lo que al parecer ubicó a los sicarios y dispuso las actividades logísticas y de vigilancia.
Por su parte, alias Dayron Pérez estaría involucrado en los seguimientos a la víctima para definir el lugar y momento en el que se haría el ataque armado.
Estos dos hombres también serían los articuladores del cobro de extorsiones, hurtos de vehículos e infraestructura petrolera, tráfico de estupefacientes, atentados contra la fuerza pública y otras conductas delictivas en la región del Catatumbo (Norte de Santander).
Alias Brandon o Grande se presentó ante las autoridades en zona rural de Tibú (Norte de Santander), con heridas en varias partes del cuerpo producto de la confrontación armada entre las disidencias de las Farc y el Eln.
Entre tanto, alias Dayron Pérez fue capturado en una diligencia realizada de manera conjunta con la Dijin de la Policía Nacional en Medellín (Antioquia).
Durante las audiencias concentradas el juez le impuso a estas personas, medida de aseguramiento en centro carcelario. Proceso en la Unidad Especial de Investigación Por otros hechos ilícitos, alias Brandon o Grande enfrenta un proceso en la Unidad Especial de Investigación (UEI).
En los próximos días será imputado por los delitos de concierto para delinquir y hurto calificado y agravado. Estos eventos delictivos están asociados al robo de volquetas y vehículos de carga. Esta información se publica por razones de interés general.
Sobre el crimen también hay una persona abatida
El pasado 26 de enero, alrededor de las 10:00 de la noche, uniformados del Goes de la Policía de Norte de Santander realizaban patrullajes en el barrio Las Delicias, cerca de la plaza de mercado de Tibú, cuando notaron la presencia de dos hombres en motocicleta que adoptaron una actitud sospechosa al percatarse de los policías.
Al intentar girar bruscamente para evitar el contacto con las autoridades, los sujetos perdieron el control del vehículo y cayeron al suelo.
Sin embargo, en lugar de rendirse, ambos se levantaron rápidamente y emprendieron la huida a pie.
Fue en ese momento cuando sacaron armas de fuego y comenzaron a disparar, desatando un enfrentamiento en plena vía pública.
El cruce de disparos terminó con uno de los hombres tendido en el suelo, mientras que el otro logró escapar.
Al inspeccionar el cuerpo, las autoridades inicialmente no pudieron identificarlo, pero días después confirmaron que se trataba de Jhon Jader Rojas Castañeda, un joven de 21 años oriundo de Teorama, quien tenía una orden de captura vigente por su presunta participación en la masacre de la familia López Durán.
El coronel Néstor Arévalo, comandante de la Policía de Norte de Santander, confirmó la información:
“Al momento tenemos una orden de captura ya ejecutada. Una persona que estuvo comprometida en este homicidio múltiple fue abatida en el municipio de Tibú”.