El Gobierno del presidente Gustavo Petro oficializó desde Barranquilla este jueves el programa Economía Popular para el Cambio contra el ‘gota a gota’, para el paso del Sistema de Transferencias a un sistema de inclusión productiva, con el fin de fortalecer la economía popular, comunitaria y solidaria en todo el territorio nacional.
Se trata de una estrategia progresiva y escalonada, que aporta a la superación de la pobreza y contribuye a que miles de colombianos transiten con el impulso del Gobierno nacional y sus aliados, hacia el desarrollo de actividades productivas, como parte de la justicia social y económica, accediendo a créditos accesibles, fiables y seguros.
Nelly Cortecero, representante de la gastronomía afrodescendiente, resaltó desde la capital del Atlántico: “Le doy gracias a Dios y a todo este proyecto que tiene el presidente, en todo lo que tiene que ver con el fortalecimiento de los emprendimientos en la economía popular, con las personas víctimas del conflicto armado”.
El convenio entre Prosperidad Social, el Fondo Nacional de Garantías y el Banco Agrario, permitirá aunar esfuerzos para facilitar las garantías de acceso a crédito asociativo, con una colocación prevista de más de $500.000 millones, a través de los sectores bancario, solidario y cooperativo.
“Empieza la transición de los subsidios hacia la autogeneración de ingresos”, aseguró Gustavo Bolívar, director de Prosperidad Social, quien en repetidas ocasiones ha defendido la premisa de que el asistencialismo debe ser reemplazado por un impulso la autonomía financiera de los hogares.
Beneficiarios
El Gobierno del presidente Gustavo Petro oficializó desde Barranquilla este jueves el programa Economía Popular para el Cambio contra el ‘gota a gota’, para el paso del Sistema de Transferencias a un sistema de inclusión productiva, con el fin de fortalecer la economía popular, comunitaria y solidaria en todo el territorio nacional.
Se trata de una estrategia progresiva y escalonada, que aporta a la superación de la pobreza y contribuye a que miles de colombianos transiten con el impulso del Gobierno nacional y sus aliados, hacia el desarrollo de actividades productivas, como parte de la justicia social y económica, accediendo a créditos accesibles, fiables y seguros.
Nelly Cortecero, representante de la gastronomía afrodescendiente, resaltó desde la capital del Atlántico: “Le doy gracias a Dios y a todo este proyecto que tiene el presidente, en todo lo que tiene que ver con el fortalecimiento de los emprendimientos en la economía popular, con las personas víctimas del conflicto armado”.
El convenio entre Prosperidad Social, el Fondo Nacional de Garantías y el Banco Agrario, permitirá aunar esfuerzos para facilitar las garantías de acceso a crédito asociativo, con una colocación prevista de más de $500.000 millones, a través de los sectores bancario, solidario y cooperativo.
“Empieza la transición de los subsidios hacia la autogeneración de ingresos”, aseguró Gustavo Bolívar, director de Prosperidad Social, quien en repetidas ocasiones ha defendido la premisa de que el asistencialismo debe ser reemplazado por un impulso la autonomía financiera de los hogares.
