Siete años han pasado desde la firma del Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera. Siete años desde que 14.000 mujeres y hombres que pertenecieron a las entonces FARC-EP, iniciaron su tránsito a la vida civil. Hoy, 12.113 personas adelantan su proceso de reincorporación.
Siete años después, en todos los territorios de Colombia, encontramos una historia de reconciliación, una historia de una mujer o un hombre que le está diciendo nuevamente sí a la paz, ya sea a través de un proyecto productivo, de una acción comunitaria, a través de la educación, de liderazgos campesinos y urbanos, y entre otras, de un compromiso de construir una nueva nación donde sea la paz la mejor forma de vida.
El 24 de noviembre de 2016, se consignaron las firmas en un documento que proyectó la hoja de ruta para una paz estable y duradera: Reforma Rural, Participación Política, Fin del Conflicto, Solución al Problema de las Drogas Ilícitas, Acuerdo sobre Víctimas, e Implementación, Verificación y Refrendación; los puntos que desde entonces permitieron que el planeta conociera que, en Colombia, el camino de la reconciliación era posible.
La reincorporación social, política, económica, ha sido un pilar. Un propósito al que cientos de mujeres y hombres le han apostado desde los territorios. Personas de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN), han acompañado a quienes adelantan su proceso en las comunidades. Por eso, desde la firma del Acuerdo a hoy, siete años después, recogemos y destacamos algunas acciones que ha dejado este trasegar.
Acceso a tierras
Más de 30 predios adquiridos, haber superado la entrega de 3.500 hectáreas desde el Gobierno nacional a firmantes de paz para la ejecución de proyectos productivos y posibilidades de iniciar proyectos de vivienda, en los antiguos ETCR y fuera de ellos, son un paso muy importante en aras de la consolidación de una Reforma Rural Integral que a gritos ha pedido el campesinado históricamente en Colombia. Solo durante el último año, se adquirieron 13 predios y se avanza en la adquisición de 26 más para que esas mujeres y esos hombres que con sus familias sueñan echar raíces, puedan lograrlo.
Educación
Tras siete años de la firma del Acuerdo de Paz, 7612 firmantes de paz han accedido a educación básica primaria, secundaria y media a través de diferentes Modelos Flexibles de
Educación para adultos y 344 han accedido al nivel de educación superior. Asimismo, 320 personas en proceso de reincorporación han recibido apoyo para matrícula de educación superior en los niveles técnico profesional, tecnológico y universitario y 7250 han adelantado estudios en formación para el trabajo.
Corresponsabilidad
Destacar las relaciones estratégicas que suman esfuerzos para una reincorporación más amplia y dinámica, pues siete años después, se ha venido coordinando el relacionamiento estratégico con actores privados nacionales y territoriales (empresas, gremios, fundaciones, academia), así como organismos internacionales y de la cooperación para consolidar la atención y acompañamiento brindados a firmantes de paz, sus familias y comunidades.
En este sentido, se han desarrollado alrededor de 587 iniciativas con 451 actores privados y se ha acompañado a 89 proyectos de cooperación internacional por un valor estimado de USD132 millones que impulsan las dimensiones de sostenibilidad económica, reincorporación comunitaria, equidad de género, reincorporación social, fortalecimiento institucional y seguridad.
Proyectos e iniciativas productivas
Con un profundo conocimiento en el campo textil y en las labores pecuarias, sumado a la sabiduría adquirida directamente de la naturaleza que les rodea, las y los Firmantes del Acuerdo de Paz, se embarcaron en la construcción de una vida nueva a través de los proyectos e iniciativas productivas.
Mediante la sostenibilidad económica, han demostrado que tanto los proyectos individuales como los colectivos han contribuido a la dignificación, dinamizando las economías en los territorios. Siete años han transcurrido, y en la actualidad, más de 5.700 proyectos con un desembolso de $100.837.686.468 han cobrado vida. En los territorios, florecen talleres de confección, producción de leche, elaboración de miel, creación de artesanías y una diversidad de productos y acciones que solo la paz ha permitido. Eso sí, con un reto gigante, y es superar las barreras de lo que pudo haberse hecho mejor.
Hoy, siete años después, enfrentamos el desafío de estabilizar cada proyecto e iniciativa desde el Gobierno nacional. Pero nos complace ver cómo la paz ha permitido saborear café de excelente calidad, presenciar la participación en ferias de moda y destacarse a nivel nacional e internacional con otro sin fin de productos transformados del campo.
Salud
Al cumplir los 7 años de la firma del Acuerdo Final de Paz, el 99. 6%, es decir 12.069 firmantes de paz del proceso de reincorporación están afiliados al Sistema General de Seguridad Social en Salud (SGSSS). La Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) en conjunto con las instituciones competentes, orienta a las y los firmantes de paz y a sus familias para que accedan al SGSSS y reciban una atención integral donde se incluya no solo la recuperación del estado de salud, sino también la promoción de hábitos de vida saludable. Así mismo, promueve espacios de formación y educación porque reconoce que un buen estado de salud es proporcional a la calidad de vida y da bases para alcanzar propósitos colectivos e individuales.
¡Lo que viene!
Con enorme alegría, y en función de una reincorporación integral y efectiva, la directora de la Agencia para la Reincorporación y la Normalización – ARN, Alejandra Miller Restrepo, anunció la aprobación del Programa de Reincorporación Integral, que, de manera concertada en el más reciente CNR, fue discutido e inicia la ejecución de esa hoja de ruta que tendrá como premisas la integralidad y el efectivo cumplimiento de lo pactado en La Habana, y ahora, con el firme compromiso de avanzar en la reincorporación social, económica, política, con las mujeres siendo protagonistas, donde las comunidades tengan participación, donde no haya distingo por raza o etnia, donde cese la estigmatización; y el respeto por la vida honre a los más de 400 firmantes que a la fecha han sido asesinados.
“En 10 meses hemos venido trabajando para desatrasar la deuda con la reincorporación, con la aprobación del Programa de Reincorporación Integral -PRI-, en el CNR, avanzamos en la estrategia de sostenibilidad de los proyectos productivos, la estrategia de empleabilidad de las y los firmantes de paz, avances importantes alrededor del enfoque de género y el empoderamiento de las mujeres que es sin duda, un pilar fundamental en la deuda histórica para la garantía de los derechos”, expresó Alejandra Miller Restrepo.
Un momento de reflexión es este día, que nos dice y reafirma como Gobierno nacional, que el Cambio es la mejor decisión, que la paz es el camino correcto en la historia, que aquí, y en cualquier rincón del planeta, los gritos de paz retumben más fuerte que el sonido horrible de los fusiles, que la reconciliación y el reconocimiento de las víctimas como corazón de un Acuerdo histórico, serán siempre la razón de una nación que, a pesar de quienes aún no creen, llegará a ser una nación en Paz Total.