“Desde la Defensoría del Pueblo rechazamos las acciones criminales de los grupos armados ilegales que delinquen en el municipio de Jamundí y su zona rural, de manera particular, el atentado con un carro bomba en el corregimiento Potrerito, en donde a causa de la explosión resultaron heridas 10 personas” manifestó el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis.
El reporte preliminar de las autoridades locales da cuenta de que hay otras 15 personas aturdidas por el impacto de la detonación, incluidos algunos uniformados de la Policía Nacional. Todos fueron llevados al hospital Piloto, con sede en la cabecera municipal de Jamundí, donde son valorados y atendidos.
El ataque en el corregimiento, dirigido contra la estación de Policía, alcanzó a afectar su estructura, dos vehículos particulares, cinco viviendas y la institución educativa Alfonso López Pumarejo.
“Enviamos nuestra solidaridad a las personas que resultaron heridas y lesionadas en este hecho criminal, el cual vulnera flagrantemente los derechos humanos y va en contravía de lo establecido en el derecho internacional humanitario”, expresó Carlos Camargo Assis.
El equipo en territorio de la Regional Valle del Cauca estará atento a brindar el acompañamiento que requieran no solo las víctimas civiles del atentado, sino la comunidad de Potrerito, que ahora mismo está inmersa en un ambiente de zozobra.
Lo ocurrido en horas de la mañana de este viernes es la materialización de la Alerta Temprana (AT) 030, que da cuenta de los riesgos a los que están expuestos los habitantes de Jamundí y su amplia zona rural. La detonación del carro bomba en el corregimiento podría influir negativamente en la jornada democrática del próximo 29 de octubre, pues a los ciudadanos les daría temor salir a ejercer su legítimo derecho al voto.
“Llamamos a los entes competentes y a todas las fuerzas del orden para que les den toda la atención y seguridad a los jamundeños, pero también para que blinden los comicios. Y a los grupos armados ilegales: ¿hasta cuándo con sus actos de crueldad?, no sigan contrariando los deseos de paz de los colombianos, especialmente de quienes viven en los campos, que son más susceptibles de actos como el sucedido hoy”, concluyó el Defensor del Pueblo.