El joven que fue extraído inconsciente de un pozo de 28 metros, luchó por su vida durante cuatro días pero no resistió.
Víctor Mendoza (23), funcionario de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) murió la tarde del viernes en el CDI ubicado en la Casa Sindical.
El pasado 18 de abril, el joven fue rescatado por los bomberos de Iribarren, desde la profundidad de un pozo donde permaneció por varias horas luego que las herramientas con las que excavaba le cayeron en la cabeza.
A pesar de los esfuerzos médicos, Mendoza se mantuvo en estado crítico por el traumatismo craneoencefálico severo y no se recuperó.
El hecho se registró en el Caserío Las Tunas, sector Amador Camejo, donde un bombero bajó aplicando técnicas de rapel cerca de 28 metros de profundidad, para sacarlo del confinamiento en estado de inconsciencia, por un fuerte impacto recibido en uno de los pómulos de su rostro, por un tobo utilizado para extraer material granular del pozo”.