Cuatro frentes de trabajo desplegaron su presencia en la frontera con Venezuela, en una operación articulada con todas las fuerzas militares y de Policía que busca devolver la seguridad y la convivencia a los pobladores.
La ofensiva también apunta a poner orden y control a la migración de venezolanos hacia territorio colombiano, que es la principal prioridad establecida por el presidente Juan Manuel Santos en su reciente visita a Cúcuta.
Ayer, en un recorrido que hicieron por el barrio La Parada, en Villa del Rosario, el comandante de las Fuerzas Militares, general Alberto José Mejía, y el director nacional de la Policía, general Jorge Hernando Nieto Rojas, se revelaron las cuatro estrategias con las que se hará frente no solo al crimen organizado en la frontera, sino a delitos como extorsión, contrabando y narcotráfico.
Asimismo, al desorden que está generando el ingreso masivo de migrantes venezolanos.
En su intervención ante los periodistas en La Parada, Mejía detalló que las estrategias corresponden a un efectivo control migratorio, una ofensiva de lucha contra el contrabando de hidrocarburos, ganado y carne en canal en las trochas.
Asimismo, a prevenir y controlar los delitos que afectan la convivencia y la seguridad ciudadanas y la atención humanitaria a los migrantes.
Este trabajo, según detalló el oficial, estará bajo la responsabilidad, no solo del Ejército y la Policía, sino de todo el aparato del Estado, incluidas las alcaldías y gobernaciones a lo largo de la frontera, “porque la idea es imponer el orden en los más de dos mil kilómetros”.
En desarrollo de estas líneas de trabajo, Nieto explicó que la presencia no solo se está dando en Cúcuta y Villa del Rosario, sino en Norte de Santander y las partes más críticas de los demás departamentos y municipios fronterizos.
El oficial mencionó que el Ejército y la Policía designaron más de 450 uniformados pertenecientes a los distintos grupos y batallones presentes en la frontera para que desarrollen acciones integrales en los puentes fronterizos y, especialmente, en el corregimiento de La Parada, Villa del Rosario, con el fin de garantizar el bienestar de los pobladores.
El trabajo en las trochas será permanente con cien hombres de la Policía y el Ejército para combatir a las bandas criminales, Los Rastrojos, Los Pelusos y a la guerrilla del Eln que controlan el ingreso de contrabando de carne e hidrocarburos a territorio nacional.
Nieto reveló que en lo corrido del presente año se llevan destruidas cuatro trochas en la zona de La Parada.
Por otro lado, los oficiales coincidieron en que además del trabajo que adelantarán las fuerzas militares y las entidades gubernamentales, “es importante también contar con el concurso de todas las partes que sean posibles, como líderes comunales, concejales, empresarios, comerciantes, porque este es una causa que nos compete a todos, no solo al Gobierno Nacional”.
Mejía señaló también que la alianza con la Fiscalía es la fórmula para judicializar a los que están desestabilizando la seguridad y la convivencia en la frontera.
“No podemos permitir que los criminales sigan haciendo de las suyas”, sostuvo.
Otras prioridades
La extorsión que están promoviendo las bandas criminales en la frontera se presenta como el delito con la mayor prioridad para atacarlo, dijo el comandante nacional de la Policía, general Jorge Hernando Nieto Rojas.
“Este es un pedido especial que hicieron autoridades, comerciantes y empresarios de los municipios fronterizos, y tengan la plena seguridad que lo vamos a combatir con toda la fuerza”, dijo el oficial.
El comandante de las Fuerzas Militares, general Alberto José Mejía, insistió en que el combate de las organizaciones criminales como Los Rastrojos, Los Pelusos y la guerrilla del Eln será clave para devolver la tranquilidad a los pobladores.
Al ser indagado sobre los ciudadanos venezolanos que sean sorprendidos ingresando al territorio nacional por las llamadas trochas, el oficial precisó que en este tema hay ya un trabajo articulado con Migración Colombia para devolverlos a su país de origen.