La representante en Colombia del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Juliette De Rivero, exigió la liberación de las cerca de 18 personas que fueron secuestradas el pasado 18 de julio en el municipio de Puerto Rondón, Arauca.
«Estamos preocupados por la situación de estas personas que incluyen niños y niñas, exigimos a los grupos armados de Arauca su liberación», puntualizó la representante.
A través de la cuenta de X de la Organización de Naciones Unidas, De Rivero pidió a las autoridades del país reforzar la capacidad de las regiones para responder ante esta situación y con ello poder prevenir mayores violaciones y amenazas contra defensores y defensoras, líderes y lideresas del departamento, además de la situación a la que se han visto sometidos los niños y niñas que habitan la región.
«Nos preocupa el desplazamiento masivo que se ha visto en los últimos días, la situación particular de Puerto Rondón y de Tame, las amenazas contra líderes y lideresas sociales, y la situación que vive la niñez en el departamento de Arauca, amenazada por la presencia de actores armados cerca de escuelas y por los combates y enfrentamientos que se dan entre ellos», indicó.
El alcalde de Arauca, Juan Quenza, apuntó que en la actualidad en el municipio de Puerto Rondón y Tame hay más de 200 familias desplazadas, entre los secuestrados, según informó el mandatario local, se encuentran cinco menores de edad, de 16, 10 y 5 años.
En su momento, las autoridades de Arauca indicaron que los grupos armados justificaron las retenciones ilegales debido a que, a su juicio, se encontraban colaborando con el bando enemigo.
«Desafortunadamente, a cualquier persona la pueden estar señalando de apoyar al grupo contrario y de ser partidarios de alguno, por ese objetivo son llevados», agregó el comandante de la Policía en Arauca, coronel Carlos Angarita.
Juliette De Rivero, también exigió enfáticamente que «la población civil tiene que quedar fuera de esta guerra entre armados en el departamento de Arauca».