“Aquí el gobierno no viene a aliarse con un bando armado, llámese como se llame, a ayudarle a matar a la gente del otro bando, o sea, a meterse en la guerra, una guerra sin sentido, en mi opinión. No. Aquí el gobierno viene es a proponer la paz”.
Así lo manifestó el presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, en un contundente mensaje enviado al país desde el municipio de Arauquita, Arauca, donde lideró el ‘Encuentro Territorial Economías para la Vida’.
“Aquí las alianzas entre armados no funcionan si no es para hacer la paz. Las alianzas entre armados o las guerras entre armados solo son guerra y ya no le sirven a la población”, sostuvo.
El mandatario intervino ante un auditorio de más de dos mil personas, entre líderes campesinos de las cadenas productivas de cacao, leche y de otros sectores de la región, autoridades locales y representantes de las comunidades.
“Los funcionarios de gobierno, cualesquiera que sean, aquí deben tener el mismo discurso del presidente de la República, votado por el pueblo, o sea, respetar el pueblo. Y el pueblo votó paz. No votó alianzas militares por aquí o por allá. No nos interesa”, advirtió.
De acuerdo con el presidente Petro, “a veces esas alianzas entre grupos armados no son sino asociaciones para delinquir y lo que producen son muertos”.
“El gobierno, en representación del Estado colombiano, viene es a construir la Constitución del 91, que es nuestra Constitución, nuestra norma de normas”, dijo.
Complementó que el Gobierno del Cambio “viene es a construir un diálogo con ustedes, genuino, transparente, donde ustedes tomen decisiones de poder popular en el territorio, a las cuales haremos caso hasta que alcance la plata”.
“Si no alcanza, lo diremos: hermanos, esto ya se acabó, el bolsillo quedó roto. Pero lo diremos con franqueza, sin demagogia”.
El llamado del Jefe de Estado a sumarse a la asociación para la paz que plantea el gobierno lo extendió a los grupos armados ilegales que operan en el territorio.
“La propuesta que hacemos es esa: una asociación para la paz. Todo el que quiera, haya estado vinculado a la violencia, como sea, es bienvenido a la paz. Pero nadie, ni del gobierno, ni de la sociedad, cualesquiera, es bienvenido a la guerra y a la violencia”, dijo.
“No hay alianzas militares para la guerra y la violencia, porque esa es una alianza para la muerte. Hay es alianzas para la paz”, reiteró.
Dijo que los grupos armados ilegales, los de fusil, tienen en sus manos la decisión de dejar el fusil y volverse cooperativistas del cacao, o seguir guerreando contra la sociedad en su región, caso en el cual “van a perder la región, porque la gente quiere la paz, quiere progresar y quiere vivir mejor”.
“Pueden ayudar dejando el fusil o pueden tratar de impedirlo, con lo cual, en mi opinión, cometerían un gran grave error, histórico”, concluyó el presidente de la República.