Dos hombres que intentaron mejorar su situación económica al dejar atrás sus hogares, murieron esta semana, mientras aguardaban el retorno a sus lugares de origen en los refugios para migrantes de San Antonio del Táchira.
Ubaldo Aguilar de 56 años, regresó a Venezuela desde Colombia, era oriundo del estado Yaracuy, padecía de cáncer pulmonar con metástasis y sufrió un infarto. Estaba recluido en el PASI liceo Manuel Díaz Rodríguez, murió mientras era atendido en el Hospital Samuel Darío Maldonado.
Otro hombre que padecía tuberculosis también falleció y al igual que Aguilar, fue enterrado el jueves en medio de protocolos de bioseguridad.
Se trata de Julián Pérez Pinto, de 28 años de edad, originario del estado Anzoátegui y quien se había trasladado a San Antonio del Táchira en busca de mejores oportunidades económicas.
Ambos encontraron su último refugio en el Cementerio Municipal de San Antonio, en un terreno facilitado por la alcaldía local, al que fueron llevados, enfundados en una sencilla caja de madera, que antes sirvió de envoltorio a las carpas donadas por Acnur y en las que hoy se cobijan cientos de venezolanos que, como ellos, sueñan con poder regresar al seno de sus familias. Ubaldo Aguilar y Julián Pérez no lograron completar su viaje de retorno.